¿CÒMO HABLAR CON MI HIJO (A) SOBRE LAS DROGAS?

Tal vez uno de los temas más complejos y complicados para los padres, es el conversar con sus hijos acerca de las drogas (las mismas que van desde las más comunes como el alcohol y cigarrillo, hasta llegar a otras más letales como son: la marihuana y el éxtasis). En ocasiones, esta falta de abordaje del tema se da porque muchos padres lo consideran innecesario dada la seguridad que tienen acerca de la educación que les han dado a sus hijos y piensan que estos temas son muy lejanos a ellos y a su entorno. Otro grupo de padres, se sienten  incómodos y/o temerosos al hablar con sus hijos del tema, pues consideran no conocer lo suficiente como para abordar la cuestión con propiedad. Muchos padres creen que sus hijos saben más que ellos, y eso les hace sentirse inseguros para iniciar el diálogo. Por otro lado, están los padres que piensan que si destapan el tema, estimularán la curiosidad de sus hijos hacia las drogas, aumentando su interés por consumirlas. Este temor, si lo analizamos con detenimiento, obviamente es por completo infundado.

Lo que sí es seguro, es que el consumo de drogas, es un problema que aqueja a muchas familias y en muchos casos de un modo silencioso. Es por ello, que la prevención temprana basada en la educación e información, cobra vital importancia en la formación de los niños y adolescentes.

A continuación encontrarás algunas recomendaciones para cuando toques el tema con tu hijo. Te darás cuenta que te será de gran ayuda la comunicación que estableciste con él desde pequeño.

• A muchos padres les cuesta determinar el momento exacto para conversar del tema, sin embargo buscar el momento ayuda a mantener la costumbre del diálogo. Anime a su hijo a que le cuente cómo le fue en el día, y háblele sobre sus actividades. Este intercambio reforzará la relación entre ambos y facilitará la conversación sobre temas más difíciles.
  
• Trate con seriedad y respeto los problemas de su hijo. Aunque puedan parecerle triviales, recuerda que para él no lo son, y si no siente que lo escucha, irá dejando de ser una persona importante con quien contar.
• Recuérdele su punto de vista sobre las drogas, explicándole los motivos que le llevan a sostenerlo. Las drogas no son inadecuadas porque usted lo dice, sino porque existe una base científica que respalda lo que usted le dice.
• Explíquele la importancia que tienen las normas existentes en la familia acerca de las drogas. Asegúrese de que entiende su razón de ser, y que no cree que se trata de una imposición dada como padres.
• Recuerde que su hijo conforme vaya creciendo, espera disfrutar de una mayor libertad. Cuando usted como padre decida que es el momento de ampliar sus límites, asegúrese de que haya comprendido la responsabilidad que conlleva tener mayor autonomía.
• Algunos padres pretenden influir en la decisión de su hijos respecto a tener unos u otros amigos. Aunque esto se hace con la mejor de las intenciones, suele esta pretensión acarrear más problemas de los que pretendían evitarse. Intente conocer a los amigos de sus hijos, y cuando vayan a su casa, trátelos como a cualquier otro invitado. Sus hijos le respetarán más, tanto a usted como a sus ideas.
• Es importante que sepa que estará a su lado siempre que lo necesite, para ayudarlo a afrontar sus problemas, y aconsejarle acerca de las soluciones que, en su opinión, pueden resultar más útiles. No dé por sentado que ya sabe que su apoyo es incondicional.
• Muchos padres piensan que una buena estrategia para distanciar a sus hijos del consumo de drogas es contarles historias exageradas. Aunque estas tácticas atemorizadoras puedan tener alguna eficacia a corto plazo, a medida que su hijo crezca dejará de creer en ellas y, de paso, puede que usted pierda la credibilidad para él. Podría terminar cuestionándole cualquier otro consejo que le hubiera dado.
• Muéstreles que confía en él (sin dejar de mostrar su descontento si abusa de esa confianza).

Finalmente, recuérdele siempre que se dé la oportunidad, su punto de vista acerca de las drogas, de manera que no tengan ninguna duda al respecto. Es necesario que los niños y sobretodo los adolescentes entiendan que lo que a usted como padre le interesa es su salud, su bienestar, su felicidad y que usted siempre estará para resolver sus dudas, escucharlo o ayudar si la situación así lo requiere. No siempre es sencillo, sin embargo es parte de la invalorable misión de ser padres.