martes, 6 de mayo de 2014

BUSCANDO EL EQUILIBRIO EN LA EDUCACIÓN DE LOS ADOLESCENTES

Conforme pasa el tiempo, cada día es mayor el número de padres de familia, que solicita el apoyo de educadores y psicólogos, los que buscando encontrar orientación que les permita mejorar la relación con sus hijos adolescentes, quienes se encuentran en la etapa más fascinante e inquietante que tiene el ser humano: la adolescencia.

Los tiempos han cambiado y muchos padres han tratado de adaptarse a una adolescencia muy distinta a la que ellos tuvieron. Por lo que en ocasiones, resulta curioso observar que aquellos padres que les exigen a sus hijos tomar decisiones correctas, suelen presentar gran inseguridad en su rol de padres, siendo incluso víctimas del entorno, de los medios de comunicación o de la moda. Esto se puede ver reflejado un discurso open mind o moderno, que a la larga se traduce en un estilo de crianza permisivo y con una percepción difusa del rol del padre para los hijos.

Hasta hace unas décadas, la mayoría de los padres mostraban abiertamente su desacuerdo frente a temas relacionados a la actividad sexual temprana o al consumo de alguna sustancia que pudiera ser nociva para su hijo (alcohol, tabaco, etc.). A la fecha, esa postura ha cambiado de dirección y un buen número de padres guiados por el sentimiento de culpa, dado el poco tiempo que tienen para compartir o la inseguridad, se han convertido en “amigos” de sus hijos, dejando de lado su rol de padres.

Esta situación ambigua genera conflictos y podrían aparecen preguntas como: ¿quién le rinde cuenta a sus amigos?, ¿acaso no esperamos la absoluta comprensión de nuestros

Si retrocedemos dos décadas y nos ubicamos en la adolescencia de los padres de ahora, veremos qué la mayoría recibió mensajes como: “preocúpate por tus estudios y luego en otros temas (fiestas, alcohol, relaciones sexuales, etc.)”. Sin embargo, ahora es frecuente ver a padres tratándose de convencer, de aquello que sus hijos y los medios de comunicación (música, series de televisión, etc.), les dicen de manera verbal o iconográfica. Los mensajes actualmente son: “si consumes alcohol, no pasa nada, pues todo el mundo lo hace”, “la virginidad está desfasada, es de tontos mantenerla”, “sino haces lo que hace el resto, estas en nada”, etc., estos mensajes inundan rápidamente la mente de los adolescentes, es por esta razón, que la presencia emocional de los padres, cobra gran importancia, pues sólo con una apertura, afecto, seguridad y firmeza, tendrán la posibilidad de desarrollar actitudes y valores en pro de una vida afectiva saludable.


Estamos a tiempo de continuar nuestra labor de padres (no sólo amigos o confidentes), de fortalecer las reglas (con respeto y firmeza) y de continuar expresando nuestro amor (con seguridad y coherencia).

Ser padres nunca fue fácil, mucho menos ahora, que se avanza con gran prisa por evolucionar. Evitemos correr, pues la niñez y la adolescencia son cortas y se forma en el presente para evitar problemas en el futuro

JAVIER VARGAS ORDINOLA
Psicologo Especialista en Psicoterapia Infantil y del Adolescente